Aunque siempre me esmero al máximo para elaborar productos duraderos y de gran calidad, todavía no he conseguido que mis joyas sean indestructibles. Como cualquier otro material, se pueden deteriorar con el uso y el paso del tiempo. Quizá te resulte sorprendente el hecho de que las piezas estén elaboradas a base de papel, pero no tienes por qué preocuparte. Todas las joyas están preparadas para acompañarte en tu día a día y sobrevivir al uso cotidiano. Cada una de las piezas de papel está tratada concienzudamente con varias capas de distintos barnices para garantizar su resistencia al polvo, a la humedad y a los golpes en condiciones normales de uso (roces, caídas, transporte, almacenamiento...). Aun así, aquí tienes una serie de recomendaciones de cuidado y conservación para prolongar la vida de tus joyas favoritas:
- Usa el agua con moderación y evita el contacto prolongado con líquidos. Todas las joyas están preparadas para resistir a pequeños chapuzones accidentales y en días húmedos y lluviosos, pero no olvides que el material base es papel. Así que recuerda, por ejemplo, quitártelas antes de ducharte o lanzarte a una piscina, o sacarlas del bolsillo de la chaqueta antes de poner una lavadora.
- Evita el contacto con perfumes, cremas, lacas, maquillajes o similares. Si vas a usar alguno de estos productos, primero espera a que la piel esté seca y por último completa tu look con tus joyas de papel preferidas.
- Procura no dormir ni hacer deporte con tus joyas de papel.
- Cuando no vayas a usar tus joyas durante un tiempo, puedes conservarlas protegidas dentro de una bolsita de plástico, en un lugar seco y alejado de la luz. Puedes limpiarlas con un pincel suave o con una gamuza seca. Nunca utilices productos químicos para su limpieza.